En las “Entrevistas de Heidy”, como ustedes saben su objetivo es contar historias, esas historias maravillosas que son contadas por quienes las viven, en algunos nos avocamos con familiares o amigos cercanos a esos guatemaltecos que tienen algo que contar, que transmitir y aquí lo pueden hacer.
En esta oportunidad presento al licenciado Mario Recinos Lima quien es Licenciado en Comunicación Social, posee una maestría en Comunicación para el Desarrollo además, es un connotado periodista guatemalteco que desde que se inició en esta noble carrera no ha hecho más que ir para adelante obteniendo valiosos triunfos y muchas satisfacciones a través de los años. Hoy quiero presentarles parte de sus logros acompañados también de anécdotas y recuerdos de su vida no solo profesional sino tambié particular adentrándonos un poco en sus recuerdos de niñez de juventud y sobre todo de su vida profesional.
No está de más decirles que Mario ha sido y será un gran amigo que me ha acompañado y con quien he compartido diversidad de actividades periodísticas y vivencias tanto en la universidad como en la APG de la cual los dos hemos sido directivos, además, miembros del Instituto de Previsión Social del Periodista, IPSP.
Mi estimado Mario bienvenido a “Las entrevistas de Heidy”, hoy conoceremos muuuchas cosas de ti.
Antes que nada mi estimada y querida amiga es un gusto para mí, expresarme en tu espacio y como tú dices contar aspectos de mi vida personal y profesional, y aquí listo para contestar tus preguntas.
Para comenzar quiero que acomodes tus recuerdes y vayamos en un viaje hacia tus primeros años ¿Qué recuerdos tienes de tu niñez junto a tu familia? ¿Cómo recuerdas esa etapa en Jalapa? Bueno yo nací en la ciudad de Jalapa allá por 1959 y desde niño en la escuela me gustaba participar en actividades culturales y deportivas, tales como teatro y danza. Viví como se dice, los años maravillosos rodeado de amigos y amigas, así como de mi madre luchadora y mis hermanos. Soy de la generación que pagaba dos centavos por ir a ver televisión en la casa de unos vecinos para ver Bonanza, El Gran Chaparral o Combate, que eran las series de mayor audiencia en los años 60 y 70. Me siento privilegiado de haber estudiado todo el día en la escuela primaria y en las tardes participar en la confección de los periódicos murales, concursos de lectura, pintura y declamación, lo cual considero, fue lo que me hizo tener la vocación periodística años después.
¿Y de tu época de adolescente qué nos cuentas? A pesar de tener una lesión en la pierna izquierda participé en atletismo, al grado de ser seleccionado de este deporte en la Escuela Normal. En ese tiempo disputábamos la pista del Mateo Flores con los equipos del San Sebastián, Educación Física y otros. Además, fui aprendiz de guitarra y miembro de la Juventud Franciscana en la zona 12 de esta capital. A los 18 años ya era el vocal más joven del Comité pro mejoramiento de la colonia Ciudad Real. Fueron experiencias muy enriquecedoras y de gratos recuerdos.
Un pajarito me contó que estudiaste Economía ¿Por qué decides estudiar para periodista y cómo fueron tus primeas experiencias en la Escuela de Ciencias de la Comunicación de la USAC? Efectivamente en 1979, luego de graduarme de maestro de primaria en la Escuela Normal, ingresé a la facultad de Ciencias Económicas de la USAC, mi objetivo en ese momento era graduarme de economista. Era una época muy difícil por la represión a la comunidad Sancarlista. A pesar de ello junto a varios compañeros creamos el Taller Artístico Popular, un experimento de teatro, música y periodismo alternativo. Nos presentamos en la capital en varios escenarios populares, en Coatepeque, Escuintla y Chimaltenango. Un año después tomé la decisión de trasladarme a la Escuela de Ciencias de la Comunicación en donde participé activamente en el movimiento estudiantil y en la lucha por que la Escuela contará con su propio edificio, ya que en ese momento ocupábamos las instalaciones de la Escuela de formación de Profesores de enseñanza Media EFPEM.
En relación a la ECC cuéntanos ¿Qué profesor o profesora te dejó más recuerdos tanto por sus enseñanzas como por su manera de impartir su cátedra? Podría decirte que los años ochenta fue un periodo difícil, sin embargo, recuerdo gratamente a maestros como Helen Umaña, de origen hondureño que luego fue premio nacional de literatura allá, a Marta Sánchez que se fue a la UNAM, Zoilita Reyes, Felix Loarca, Francisco Mendizabal Prem, Sergio Guerra, Ana María Pedroni, Mario Tobar Caravantes, Carlos Interiano, Mario Alberto Carrera y Marco Augusto Quiroa entre muchos otros y muy valiosos docentes que pasaron por las aulas de la ECC.
Tú has mantenido una relación estrecha con la ECC dinos ¿Qué diferencias podrías mencionar de la antigua escuela de comunicación a la que actualmente existe?Hay que entender que en ese momento éramos pocos estudiantes y existía mayor convivencia, la ECC acababa de pasar por su primer Congreso de Reestructura en 1978 y se vivía una época de mucho temor dada la violencia y represión a la comunidad universitaria. Aún en ese ese contexto se realizaba un programa de radio, se imprimía el periódico Comunicación y se participaba en actividades de teatro, cine y concurso de carteles. Hoy la ECC tiene un crecimiento acelerado por la carrera de Publicidad y la incorporación de estudios de maestría y doctorado, así como la implementación de modernos laboratorios de radio, TV y sala de redacción computarizada que la han dinamizado. Además, hace unos años se implementó la jornada sabatina y los estudios en la modalidad virtual. Cada vez se impone la necesidad de las especializaciones y sobre todo, enseñarle a los estudiantes los retos del periodismo digital, sin obviar los principios esenciales del periodismo.
¿Qué medio de comunicación te abre la puerta y da la oportunidad de iniciar tu carrera periodística? ¿De qué año hablamos? Hablamos de finales de 1980, cuando desde el parque Concordia en la zona 1 decidimos junto con David Grajeda ir a presentarnos como aprendices a Diario La Hora. Doña Marina Marroquín era la directora y desde ese momento nos llevó a la redacción para presentarnos, ese año también hice mis prácticas en El Imparcial, bajo la tutela de maestros excelsos del periodismo Don David Vela y Don Rufino Guerra Cortave. Luego fuimos contratados como reporteros. Por las mañanas escribíamos para la Hora y por las tardes hacíamos reportajes para la División de Noticias de la VDA, de Radio la Voz de las Américas que dirigía Eduardo Mendoza. Posteriormente pasé a Diario La Tarde y El Gráfico que vivía su época de oro, dado el formato e innovación en el tratamiento informativo con sus primeras infografías y fotos de gran tamaño.
La vida consta de alegrías y a veces de sinsabores ¿Qué sinsabores te ha ocasionado tu vida como periodista y también cuéntanos que alegrías te ha dado esta tu etapa de la vida? Bueno como decía García Márquez, el periodismo como profesión no es para volverse rico, sin embargo, el ejercicio del mejor oficio del mundo, como lo dice el Nobel colombiano, nos proporciona alegrías y tristezas. Con 42 años en el periodismo te podría decir que lo más decepcionante ha sido ver morir a compañeros por la violencia e intolerancia de algunos grupos en el pasado, o que se crea que todos los periodistas tienen un precio. Lo más satisfactorio ha sido que tras la realización de algunas de nuestras noticias, reportajes y columnas de opinión, se han logrado materializar muchas acciones de beneficio social. Los periodistas podemos ser intermediarios en la solución de muchos problemas y eso es el mejor reconocimiento a nuestra labor. Aparte desde luego a ver el periodismo como un instrumento educativo y formativo para la sociedad.
¿Qué personajes has conocido por tu trabajo y quién te ha impresionado más?Ciertamente la profesión te da la oportunidad de conocer de cerca, así como intercambiar impresiones e ideas con muchos personajes de aquí y allá. Me he sentido privilegiado de conocer a Fernando Savater, filósofo español, Pepe Mujica, Mario Monteforte Toledo, Catalina Soberanis, Luz Méndez, David Vela. Conversar con Francisco Albizurez Palma, Maco Villamar Contreras, Roberto Paz y Paz, Antonio Crespo, Marco Antonio Flores y Marcela Valdeavellano. Serían muchos los que me han marcado en mi profesión, por lo que no podría señalar a uno en particular.
Tu profesión te ha dado la oportunidad de viajar y compartir tus conocimientos en varios lugares ¿Puedes hablarnos al respecto? Bueno tanto laboral como académicamente he tenido la oportunidad de viajar. Mi primer viaje fue a Honduras para la reunión preparatoria del primer Congreso de estudiantes de comunicación de Centroamérica y Panamá, que luego se realizó en Guatemala. Luego gracias a una beca estuve en Colombia en un curso para profesores universitarios sobre docencia en ciencia y tecnología. Posterior a ello estuve como expositor en México y Perú en intercambios sobre comunicación y derechos de la niñez latinoamericana.
En ese tiempo era el director del programa Barriletes que se transmitía en canal 3 y en Radio Sonora, además de un periódico con el mismo nombre. En 2001 junto a Beatriz de Rivera y Parisa Nabilli, quien trabajaba en Unicef, nos tocó representar a Guatemala en la Cumbre Mundial de televisión para niños en Macedonia, Grecia, una experiencia extraordinaria pues pude estar a la par de los productores de Plaza Sésamo, la televisión educativa de Suecia, Japón, Italia y Polonia, entre otros. Como miembro del Consejo Directivo de la Asociación de Televisión Educativa Iberoamericana, estuve también en España, Francia y República Dominicana compartiendo con muchos pioneros en la producción de programas y series para la televisión de sus países.
Si te menciono el año de 1999 ¿Qué traigo a tu mente? Fue la fecha en que la Escuela de Ciencias de la Comunicación me reconoció como el periodista del año. Yo estaba en Prensa Libre, en donde también había sido nombrado en 1998 editor del año por lo que fue doble satisfacción y un honor recibir estas distinciones. Desde luego soy del criterio como se expresó el año pasado por el colectivo de periodistas, que en nuestra labor no aspiramos a escuchar los cantos heroicos a la profesión, sino más bien, la atención y solidaridad de la sociedad en cuanto a que el ejercicio periodístico debe ser siempre sin limitaciones para que exista una plena democracia.
¿Cómo defines el periodismo? David Vela decía que para ser un buen periodista era necesario saber olfatear las noticias, aunque algunas no huelan bien, pero sobre todo saber presentarlas y escribirlas. Otros consideran que el periodismo es una forma de comunicación social a través de la cual se dan a conocer y se analizan los hechos de interés público. Desde luego que el periodismo cumple su función en un ambiente de libertad tanto para el que produce la información como el público que demanda estar bien informado. El periodismo pierde su razón de ser cuando miente, tergiversa, negocia o cambia el sentido de la noticia. En ese sentido para mi el periodismo es una profesión que implica ética y responsabilidad y sobre todo que influya en el cambio social, en el pensamiento de las personas y el desarrollo nacional.
Ser catedrático a veces no es tarea fácil ¿Cómo ves en la actualidad la enseñanza a nivel universitario? Considero que la irrupción de las nuevas tecnologías ha dado posibilidad de hacer realidad la comunicación educativa, lo virtual no le quita a la enseñanza el rigor, aunque algunos digan que la calidad ha bajado. Soy del criterio que en la medida que el docente motive, se prepare y comparta conocimientos que puedan ser traducidos a una práctica efectiva y a la lectura critica, creo que se pueden obtener los objetivos deseados. El tema pasa también por docentes que sean exigentes consigo mismos, se actualicen y sobre todo que incentiven en los estudiantes a poner pasión, ética y estética en todo lo que emprendan.
La vida no solo es trabajo también es la de compartir en familia. Tú has tenido un matrimonio estable sino me equivoco ya casi 40 años de estar juntos ¿Cómo se conocieron con Blanqui y qué secreto tienen para mantener una relación sólida?Bueno creo que trabajar en el periodismo, estudiar comunicación y compartir el mismo interés por temas y proyectos en favor de la niñez, fue el punto de encuentro. Trabajamos en El Gráfico y ahí surgió el flechazo en 1981. Nos hemos apoyado en nuestras iniciativas y utopías. Además, la relación de pareja se nutre y fortalece cuando no se ata a la codependencia, sino a la confianza y a la colaboración. Es como cultivar un jardín, el que cada día hay que abonar para que los frutos sean hermosos. Obviamente siempre hay diferencias en algunos momentos, pero no quita que se puedan afrontar. Se vive y se comparte en las buenas y en las malas, ese es el reto que todos debemos asumir y vivir siempre el presente con entusiasmo.
El pasado 17 de enero (2022) asumiste el reto de presidir la Asociación de Periodistas de Guatemala ¿Qué te impulsó a participar en la contienda electoral?En un momento de inflexión y de crisis en el gremio caracterizado por el cierre de medios, desempleo y nuevos retos en la era digital, es necesario unir a los periodistas, buscar alternativas y luchar por la dignificación de esta labor. En los actuales momentos en que prevalece la cooptación de las instituciones y en especial de la justicia, vemos que eso puede restringir o amenazar la libertad de expresión. Es consecuente entonces que hayamos tomado la decisión de participar y apoyar las propuestas de retomar el programa de protección de los periodistas, así como impulsar medios independientes y que la APG sea representativa en todo el país a partir de ampliar la membrecía y crear los encuentros regionales.
Es menester mencionar también que la APG debe trascender a la vida pública con mayor impulso y sobre todo que su administración se haga desde una visión gerencial que le proporcione los fondos para su independencia financiera, mediante medios de comunicación propios, una agencia de servicios periodísticos y el cambio de sus estatutos que ya no refuerzan el crecimiento y fortaleza de la entidad. Como decía Churchill: Un hombre hace lo que debe, a pesar de las consecuencias personales, a pesar de los obstáculos, peligros y presiones, y eso es la base de la moral humana”.
A propósito, ¿Qué actividades tienen programadas en este año que arriba a los 75 años la APG? En primer lugar, se ha declarado 2022 el año del 75 aniversario de la APG a efecto que podamos realizar diversos eventos en el marco de esa celebración. Tenemos contemplado dar reconocimientos a los asociados más antiguos, así como a todas aquellas empresas e instituciones que han sido aliadas de la entidad desde su nacimiento. Esta en preparación la revisa conmemorativa y un seminario centroamericano sobre Libertad de Expresión e Integración, al que asistirán periodistas de la región, en especial de Nicaragua, dada la situación de acoso y amenazas al ejercicio periodístico.
A esto se une también la idea de crear el museo del periodismo con piezas y elementos que han apoyado a los comunicadores en su trabajo cotidiano. Ello surgió de la donación del legado histórico de Guatemala Flash, el recodado noticiero radial de don Ramiro Mcdonald, que de manera especial ha anunciado su familia. A partir de ello muchos otros asociados y empresas apoyan el proyecto que esperamos abrirlo al público y los periodistas en mayo de este año.
Para finalizar esta plática entre amigo dime ¿Cómo te autodefines? Coherente con los principios de un periodismo independiente y solidario. Entusiasta por la edu-comunicación y el modelo sistémico de participación. Tengo el defecto de creer en que la mayoría de gente piensa positivo, cuando no lo es. Me identifico con aquellos que no se creen la mamá de Tarzán, las vedettes o bien quienes creen saberlo todo y al final no saben nada. Lo importante en la vida es hacer equipo y que cada quien aporte con sus capacidades al desarrollo del país. No me llevo bien con la hipocresía, la corrupción y el que se hable mal de los demás cuando no están presentes. En fin no soy perfecto, tengo cualidades y defectos, pero los supero con entusiasmo y actitud.
Recibiendo premio UNICEF
Quiero agradecer a Mario Recinos mi buen amigo desde hace 43 años, hemos mantenido una amistad sólida que ha perdurado a través de más de 4 décadas. Te deseo que 2022 sea un año de éxito y que tu paso como presidente de nuestra entidad sea recordado por el trabajo que realices.
Gracias a mi gran amiga Heidy por haberme incluido en sus entrevistas que por cierto he leído y me parecen creativas y porque no decirlo, uno no puede dejar de responder sus preguntas que sinceramente como dicen los jóvenes con cuento nos hace decir muchas cosas que no habíamos comentado. Espero que sigas adelante con ese entusiasmo que te caracteriza y hayan muchas entrevistas más.
