Don Oscar de León Palacios |
En “La cara amiga de los
invitados de Heidy”, hemos llevado en el año 2013 desde el mes de junio
entrevistas con artistas y personajes de nuestro país. Este año hemos querido
implementar instituciones y empresas entre otros que coadyuvan a una Guatemala
extraordinaria.
En esta oportunidad tengo de invitado a Oscar de León Gamboa, gran amigo personal y un hombre muy compenetrado en su trabajo y que sigue los pasos de sus antecesores y quien nos platicará de la
dinastía en lo que a lectura se refiere, y digo dinastía porque son ya tres
generaciones que representan a la “Editora
Oscar de León Palacios”.
Recibimos a nuestro invitado en este espacio, donde se puede decir
lo que se quiere y lo que en otros medios no se puede.
Oscar según sé, tu abuelo inició la editora ¿en qué año y qué fue
lo que a él lo motivó al fundar esta empresa?
Fue en 1957, en que mi
abuelo y mi papá deciden formar la Mimeoprenta De León hermanos. Mi abuelo era
maestro y escribía libros de texto para alumnos de primaria y mi padre era impresor,
así que fusionaron sus habilidades y formaron la Mimeoprenta.
¿Dónde se instala por primera vez la editora?
En el garaje de la casa donde
vivía mi abuelo, en la 18 calle y Avenida Centro América, en la zona 1.
¿Qué tipo de material se preparaba en los primeros años?
Eran textos escolares para
la escuela primaria, luego surge el REPASANDO, que era un folleto con preguntas
de las que venían en los test de evaluación, eso tuvo un éxito enorme, pues
tanto maestros como padres de familia los utilizaban para preparar a los niños
antes de someterlos a los exámenes de mediados y de fin de año. Todo esto se
hacía en mimeógrafo y de una manera rústica.
Esta es una empresa familiar, ¿cómo se integra tu padre a la
editora? Y ¿cómo siguieron sus hijos los pasos de él para lograr una empresa de
éxito?
Mi papá se integró desde
el principio, ya que él era el que se encargaba de las impresiones, pues se
dedicaba a las artes gráficas. Poco a poco se fueron integrando más miembros de
la familia, mi mamá fue la primera agente de ventas, ella visitaba a los
maestros y maestras para enseñarles los libros, además era la encargada de
ventas. Luego instaló una pequeña librería que era la encargada de la
distribución. Con los años dos de mis tíos se agregaron al equipo de impresores.
Tiempo después también yo me uní a ese equipo.
¿Fueron ustedes los pioneros de los libros de lectura y de texto
para escuela primaria?
Fuimos de los primeros,
junto con los Piedrasanta, llevamos casi sesenta años en esto de la publicación
de textos para escolares. Al principio éramos solo don Julio Piedrasanta y
nosotros, aunque nuestro campo era más en el área rural y las escuelas
públicas, así que nunca tuvimos competencia entre las editoras, más bien nos
hemos apoyado en nuestro trabajo. Con decirte que don Julio fue quien ilustró
los primeros libros de mi abuelo. Aunque debo contar que los primeros libros de
mi abuelo los editó La Editorial Centroamericana, que hacía sus libros en Cuba.
¿Qué retos conlleva el editar libros en un país que lee poco?
Hay que tenerle mucha fe y
confianza. Mi abuelo y mi papá la tuvieron, ellos siempre lucharon por que la
gente se educara y leyera más. Mi papá fundó un espacio especial, “La Fundación
Oscar de León Palacios”, que tenía programas para apoyar la formación de
hábitos lectores, se daba capacitación a las maestras y maestros del área
rural, se organizaban bibliotecas escolares y comunales, se publicaban libros a
autores que principiaban en el mundo de la escritura, en fin se daba apoyo a
todo aquello que tuviera algo que ver con leer.
Después de varios años de
dedicarnos exclusivamente a editar textos escolares, la editorial se amplió y
comenzó a editar material para los demás niveles educativos, hasta llegar a la
universidad, además produjo textos literarios: novelas, cuentos, poesía, etc. Eso
nos permitió incursionar más en el campo de la lectura y por tanto en el de la
cultura. No ha sido fácil, es un sueño lograr que nos convirtamos en un pueblo
que lee.
Oscar de León Gamboa |
En este tiempo es muy fácil encontrar cualquier libro por Internet,
¿esto les ha afectado en la producción de su material impreso?
Si, ha afectado, pero no
mucho, en nuestro país no son tantos los que han adoptado esa manera de
manejarse en la escuela. Nosotros aun no hemos adoptado los libros virtuales,
en ese proceso estamos.
¿Cuál o cuáles han sido los libros más importantes que han
producido en la editorial?
No es fácil contestar esa
pregunta teniendo ya tantos años en el mercado el libro, pero te cuento que los
libros de texto se vendieron por, bueno, me atrevería a decir, que millones,
especialmente Repasando. En el campo de la literatura, fuimos los primeros en
Guatemala, en editar la novela Los Compañeros, de Marco Antonio- el Bolo-
Flores, que, como es sabido, ha marcado el mundo de la novela en nuestro país y
en Latinoamérica. Otro libro muy importante es Despacho Presidencial, de Juan
José Arévalo, también la
Colección Profecías que reúne 22 libros de 22 poetas
destacados en nuestro país. Se publicaron libros de la Asociación Zacapaneca
de Contadores de Cuentos y Anécdotas, en fin, de verdad es difícil responderle
esa pregunta.
Tu abuelo o tu padre ¿tuvieron algún reconocimiento debido al
trabajo didáctico realizado?
Si. Ambos, tanto mi abuelo
como mi papá tuvieron la fortuna de ver frutos de su trabajo, y fue un trabajo
reconocido, creo que hasta la fecha. Mi abuelo es aun recordado como “El
maestro de la montaña”, por la labor que desarrolló y la ayuda que prestó a
través de su material didáctico, así como es reconocida su trayectoria como
pionero de la literatura infantil en Guatemala, en los años 50 del siglo
pasado, creo que es raro el colegio o la escuelita en donde no se enseñen sus
poemas, incluso algunos ya con música, dedicados a la mamá, al papá, a la
escuela y los maestros. Mi papá también cosechó muchos reconocimientos a su
trabajo. Se le dedicó una feria municipal del libro, se dieron muchísimos diplomas,
plaquetas, etc. Gracias a Dios, los dos pudieron escuchar aplausos a su
trabajo.
La nueva generación que son ustedes, ¿qué proyectos tienen para
mantener vigente tan importante editora para el país?
Mira Heidy el próximo y
más cercano proyecto es la escritura de unos libros en idioma maya kekchi para los grados de
segundo a sexto esto con la idea de ayudar a los maestros bilingües a impartir
clases en su propio dialecto luego seguiremos en quiche y kacchiquel y algunos
dialectos mayas más.
Por lo pronto te
agradezco la entrevista y te exhorto a continuar con tan titánica labor de “Las
entrevistas de Heidy”, adelante es importante contar con un espacio tan
profesional y variado porque aquí hay gusto para todos artistas, locutores,
entre muchos que como la “Editora Oscar de León
Palacios” tienen una historia que
contar y que gracias a tu espacio es posible que los guatemaltecos se enteren
como surgió una empresa cien por ciento nacional.
LIBROS HECHOS EN
GUATEMALA PARA LOS NIÑOS DE GUATEMALA
Entrevista realizada
por Heidy Sandoval Ruiz