El Monasterio de Nuestra
Señora de los Dolores fue fundado gracias a las limosnas de varios vecinos y la
generosa donación de doña María Ventura Arrivillaga y Coronado. Las gestiones
realizadas por los franciscanos y los funcionarios reales permitieron obtener
una cédula real en 1693, que autorizaba su fundación y el traslado de las
primeras monjas desde México.
El convento quedó fundado en
1700, habiendo sido destruido pocos años después por el terremoto de 1717.
Desde entonces, el edifico y sus habitantes fueron afectados por sismos,
problemas financieros y otras contrariedades, hasta que en 1773 la ciudad quedó
destruida por los terremotos de Santa Marta, igual que el edificio de las
monjas.
El Rey decretó el traslado
de la ciudad al valle de Panchoy o de la Ermita, donde se les construyó un
nuevo edificio para el monasterio, del que las monjas fueron exclaustradas por
los gobiernos liberales del siglo XIX.
Coralia Anchisi de Rodríguez
es académica de número de la Academia de Geografía e Historia de Guatemala y de
la Academia Guatemalteca de Estudios Genealógicos, Heráldicos e Históricos.
Desde 1995 ha formado parte de la Junta Directiva del Museo Popol Vuh, de la
Universidad Francisco Marroquín. En esa institución ha impartido varios cursos
de historia e iconografía, teniendo a su cargo la colección colonial. Ha
publicado varios artículos sobre imaginería y platería colonial, iconografía
católica, hábitos y símbolos religiosos de distintas órdenes religiosas,
joyería prehispánica, colonial, y de los siglos XIX y XX.
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